El eterno encanto del abanico

Con las temperaturas que rondan los 40 grados en muchos lugares de la península Ibérica, hablar de abanicos no es hablar simplemente de un complemento de moda, es hablar de un objeto imprescindible que ya cuenta con miles de años de historia.

The Lady with the Veil by Alexander Roslin [Public domain or Public domain], via Wikimedia Commons

El abanico desde su invención fue adquiriendo más y más popularidad hasta forjar toda una cultura a su alrededor. La historia del arte nos ofrece multitud de ejemplos del uso y abuso del abanico, en numerosos retratos el abanico aparece acompañando a damas. También los abanicos han servido para ayudar a construir argumentos de obras literarias, "El abanico de Lady Windermere" obra teatral escrita por Oscar Wilde es un claro ejemplo de ello. E incluso, en los albumes ilustrados para niños (o no tan niños)  aparecen los abanicos, ahora me viene a la cabeza una de las ilustraciones que realizó Rébecca Dautremer en el ya mítico libro "Princesas olvidadas o desconocidas".

Los abanicos además,  cuentan con un lenguaje propio creado en la era en que no existían los sms. Sostener el abanico de una determinada manera, taparse la cara con él, apoyarlo en un determinado lugar... eran señales que los pretendientes debían interpretar para saber si la pretendida estaba dispuesta a profundizar en "la relación".

Pero, estamos en el siglo XXI y a pesar de todo lo acontecido, el abanico sigue estando de moda, incluso en este 2011 aparece como revitalizado. Por ejemplo, en el desfile de Louis Vuitton para la temporada primavera-verano 2011, Marc Jacobs actual diseñador de la casa presentó un sofisticado modelo de abanico realizado en blonda,  existente en  distintos tonos y del que pende un borlón en seda, es una preciosidad. La firma catalana Tous, tampoco se ha quedado atrás y, para esta temporada Rosa Oriol ha diseñado un práctico y glamuroso abanico collar en tonos negros.

Así pues, creo que no es osado afirmar que el abanico es uno de los complementos estrella de la temporada, y que no debe faltar en tu bolso. Por cierto, si quieres darle un toque chic a tu abanico, no olvides perfumarlo.