Lift-Fermeté de Clarins

Hay dos males de los que siempre nos quejamos las mujeres, por un lado la celulitis, y por otro el horror de la flacidez corporal que aparece a medida que vamos cumpliendo años, para ambos males Clarins ha formulado diferentes cremas, que sin ser milagrosas han ayudado y ayudan a mejorar el aspecto de nuestra piel corporal. Ahora bien, me ha sorprendido muy mucho la crema Lift-Fermeté que ha creado dicho laboratorio francés. Puedo decir que de todas las cremas corporales que he testado, ha sido la crema de Clarins la que me ha dejado boquiabierta, los resultados son sorprendentes.

Para empezar, la textura, cuando abres el tarro de 200 ml te encuentras con una especie de crema espesa de color rosa pálido, da la sensación que sea difícil masajear la piel con dicha textura, pero nada más lejos de la realidad, se trata de una crema muy fundente que en contacto con nuestra piel se aplica con muchísima facilidad, se absorbe rápidamente y no deja sensación de grasa por ningún lado, todo lo contrario, la sensación es de frescor absoluto y de hidratación intensa. Además, deja la piel ligeramente perfumada con un suave aroma floral.

A medida que usemos la crema, que cunde muchísimo, empezaremos a notar otros efectos beneficiosos tales como una piel mucho más turgente, sin pliegues y mucho más flexible, todo ello gracias a los ingredientes usados tales como el extracto de tomillo limón, la efectiva centella asiática, la manteca de karité y el aceite de jojoba entre otros.

Si el formato crema no os resulta atractivo, existe una fórmula fluida, pero a mi de momento me ha conquistado la crema que sin duda no dejará de formar parte de mi neceser, aunque el precio sea elevado, el tarro que contiene 200 ml ronda los 50 euros.

Por último, recordaros que para que la crema sea efectiva la debemos usar a diario y que puede combinarse con otros tratamientos, por ejemplo, con el Lift Minceur de Clarins uno de los anticelulíticos más eficaces que he probado.